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Introducción
En cada industria, siempre hay casos extremos que desafían los límites y las barreras de lo que la sociedad considera aceptable. En este blog, vamos a hablar de 10 personas que algunos podrían decir que llevaron sus tatuajes y modificaciones corporales demasiado lejos. Estas personas han transformado su apariencia para reflejar su individualidad y expresar su pasión por el arte corporal. ¿Pero cuándo es demasiado? ¡Vamos a descubrirlo juntos!
Rico Sosa: El transformador de carne real
Rico Sosa, un artista del tatuaje de 41 años, tiene el 80% de su cuerpo cubierto de tatuajes y se está convirtiendo en un orco de verdad. Rico se hizo su primer tatuaje a los 15 años y su primera modificación corporal a los 35. Actualmente, está en proceso de cubrir todo su cuerpo con tinta negra y también se ha realizado muchas modificaciones corporales para parecerse lo más posible a un orco. Hasta ahora, ha dividido su lengua, modificado su nariz, se ha realizado implantes subdérmicos, tatuado sus ojos y la modificación más reciente son sus 500 implantes de colmillos que encajan sobre sus dientes inferiores. La pareja de Rico también tiene algunas modificaciones corporales y ambos se motivan mutuamente para seguir adelante. Rico dice que le encanta su apariencia y si pudiera hacerlo todo de nuevo en otra vida, lo haría sin dudarlo.
Philip Royer: El vampiro moderno
Philip Royer, un artista del tatuaje y del maquillaje de Montreal, siempre ha estado fascinado y obsesionado con el aspecto gótico y los vampiros, ya que son inmortales y pueden mantenerse jóvenes para siempre. Decidió transformar su cuerpo para parecerse más a un vampiro. Actualmente, tiene el 70% de su cuerpo cubierto de tatuajes y también ha realizado varias modificaciones corporales, como estirar sus orejas, agrandar sus colmillos y reconstruir su mandíbula. Sus planes futuros incluyen cubrir todo su cuerpo con tatuajes de pies a cabeza y realizar muchas más modificaciones corporales, como dividir su lengua y someterse a cirugía plástica extrema con rellenos faciales para tener una apariencia más vampírica. Philip fue víctima de acoso severo en su juventud y nunca se sintió cómodo en su propia piel, pero el día que se hizo su primer tatuaje facial, todo cambió y se sintió bien consigo mismo y se consideró más guapo.
Fletcher: El demonio tatuado
Fletcher, un artista del tatuaje de 35 años de Argentina, decidió modificar su cuerpo para parecerse más a un demonio. Se hizo su primer tatuaje a los 15 años y desde entonces ha ido añadiendo más. Su primera modificación corporal fue dividir su lengua y más tarde tatuó sus ojos de negro. Otras modificaciones incluyen orejas puntiagudas, la eliminación de sus pezones y ombligo, y oscurecer su lengua. Para Fletcher, una vez que comenzó a tatuar su rostro, no había vuelta atrás. Aunque lidia con críticas todos los días en público, no le importa. Su objetivo final es tener el cuerpo cubierto al 100% de tatuajes y realizar más modificaciones, como implantes de cuernos, para tener una apariencia vampírica y demoníaca.
Keith Edwards: El padre tatuado
Keith Edwards, padre de tres hijos y panadero, gastó más de diez mil dólares en cubrir el 98% de su cuerpo con tatuajes. Creció en un hogar religioso y se hizo su primer tatuaje a los 17 años, en contra de la aprobación de su madre. Desde entonces, ha seguido tatuándose cada vez más. También se ha tatuado los ojos de negro y dice que no fue doloroso en absoluto, aunque la parte más incómoda fue mantener los párpados abiertos durante el procedimiento. Keith dice que vive sin arrepentimientos y que parecer normal es como una enfermedad de la cual ahora está curado.
Michelle Di Donato: La madre tatuada
Michelle Di Donato, madre de tres hijos y artista del tatuaje de Florida, tiene el 90% de su cuerpo cubierto de tatuajes. Se hizo su primer tatuaje a los 21 años, a pesar de las opiniones negativas de su primer esposo hacia su apariencia. Sin embargo, más tarde se separaron y se casó con su segundo esposo, quien la ayudó a cubrir sus tatuajes antiguos y le hizo nuevos. Sus modificaciones corporales incluyen estirar los lóbulos de las orejas y también tiene los ojos tatuados de color rosa. Aunque tatuarse los ojos es un proceso arriesgado, ella dice que no se preocupaba por dañarlos.
Keith Gordon: El obsesivo tatuado
Keith Gordon, en su adolescencia, se hizo varios tatuajes que, en poco tiempo, lamentó y se sometió a un procedimiento costoso de eliminación de tatuajes para tener un trabajo de oficina. Sin embargo, más tarde, se dio cuenta de que debería haber seguido sus creencias y conservado sus tatuajes. En un lapso de cinco años, se hizo un nuevo tatuaje cada mes. Culpa a su trastorno obsesivo-compulsivo, diciendo que este trastorno rige su vida y que cuando comienza algo, se deja llevar por ello. Su esposa admite que nunca lo habría casado si lo hubiera conocido en ese estado, ya que se siente avergonzada de que todos los miren constantemente en público. Sin embargo, ella pone todo eso a un lado porque Keith es un buen esposo y padre. Por otro lado, a Keith le encanta la atención de ser diferente y le gusta mostrar a otras personas que está bien ser diferente.
Pedro Kenzo: El artista brasileño
Pedro Kenzo, un tatuador de Brasil, tiene más del 60% de su cuerpo cubierto de tatuajes y algunas modificaciones corporales extremas. Su primera modificación fue implantarse silicona en la cabeza. También tiene un par de cuernos de tornillo que se ajustan en su cráneo. Además, tiene la lengua dividida y los ojos tatuados de negro. Su siguiente modificación se dice que fue la más dolorosa hasta ahora: cortar partes de sus orejas. Pedro piensa que una vez que comienzas, no puedes parar. A pesar de recibir muchas críticas y asustar a algunas personas, Pedro dice que no le importa y que en estos días ni siquiera le molesta en absoluto. A pesar de todos los pensamientos negativos hacia él, su esposa dice que Pedro es una persona muy cariñosa y un gran esposo y padre. Él continuará viviendo su vida como él quiera y su objetivo final es tener el 90 al 95% de su cuerpo cubierto de tatuajes y realizar aún más modificaciones corporales.
Buoyo: El amante de los tatuajes
Buoyo, un tatuador italiano, tiene el 80% de su cuerpo cubierto de tatuajes. Su primer tatuaje fue a los 13 años y desde entonces su pasión por el arte corporal ha crecido. Su madre le compró su propio kit de tatuajes y, como no tenía clientes, comenzó a tatuarse a sí mismo, siendo su rostro uno de sus lugares preferidos. Aunque Buoyo ha tenido un pasado difícil y una situación familiar complicada, los tatuajes le han devuelto la felicidad a su vida. Le gusta las modificaciones corporales y en el futuro podría dividirse la lengua, pero lo que más le gustaría es tatuarse los ojos. En cuanto a los tatuajes corporales, no tiene planes de detenerse y quiere seguir tatuándose más.
Larry el leopardo: El hombre manchado
Larry, como ya habrás adivinado por su nombre, ha cubierto todo su cuerpo con patrones de leopardo. Dice que sus tatuajes de leopardo le otorgan poderes de leopardo, como correr más rápido, moverse a oscuras y cazar. Se hizo su primer tatuaje a los 20 años y desde entonces ha cubierto todo su cuerpo. Cada pocos meses, retoca la tinta en su cuerpo. Cuando Larry cubrió su cuerpo por primera vez, su familia lo rechazó durante 10 años antes de volver a hablarle. Actualmente, su madre intenta comprender sus elecciones y hacer todo lo posible para solucionar las cosas con él. Larry simplemente estaba cansado de hacer lo que la sociedad esperaba de él, solo quería vivir su vida a su manera y eso es exactamente lo que hizo.
Chiara: La apasionada
Chiara, una joven de 19 años de Roma, tiene más de 40 modificaciones corporales, que incluyen tatuajes en los ojos, 6 implantes subdérmicos, más de 20 piercings faciales y muchos otros tatuajes en su cuerpo. Se hizo su primer piercing a los 11 años y, desde entonces, comenzó a estirar sus lóbulos y a hacerse muchos de los piercings faciales por sí misma a lo largo de tres años. Seguramente te estarás preguntando cómo se hizo el piercing en el labio inferior, pues ella misma se lo hizo. Hizo una pequeña incisión y, con el tiempo, lo estiró hasta donde está ahora. Según ella, la gente la mira todo el tiempo, señalan y hablan de ella, pero no le molesta. Sin embargo, dice que es un poco difícil cuando le sacan fotos sin que se dé cuenta. No está en contra de eso, pero solo pide respeto y que le pidan permiso. Chiara dice que sus modificaciones corporales no son para llamar la atención ni para ser notada, sino una pasión y una necesidad personal. Quiere hacerlo por sí misma. Desde la creación de este video, Chiara ha transformado completamente su apariencia nuevamente, pero eso es tema para otro video.
Conclusión
Estas personas han llevado los tatuajes y las modificaciones corporales a un nivel extremo, pero cada una tiene su propia historia y razones para hacerlo. Aunque algunas pueden considerar que han ido demasiado lejos, estas personas encuentran alegría y satisfacción en su apariencia única y en la capacidad de expresarse a través del arte corporal. Mientras respeten su propio cuerpo y sean felices con sus elecciones, ¿quién puede juzgarlos? Todos tenemos el derecho de ser nosotros mismos y de vivir nuestra vida de la manera que elijamos. ¿Qué opinas sobre estas 10 personas que han llevado sus tatuajes y modificaciones corporales al extremo? ¡Cuéntanos en los comentarios!
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